[Traducción de Viviane de Moraes Abrahão; revisada por Martín Glikson y Asun López-Varela; diseño HTML, formato, y enlaces por George P. Landow.]
La novela más conocida de Catherine Gore, Cecil, o Las aventuras de un vanidoso (Cecil, or Adventures of a Coxcomb) (1841), tiene la pretensión de ser la autobiografía de un compañero de Lord Byron. Cecil Danby, que más tarde se convierte en Lord Ormington, es un dandi de la Regencia y una figura Byronica. Como narrador en primera persona y poco fiable de la novela, arroja una ingeniosa y al mismo tiempo conflictiva y doblemente reveladora luz sobre la Regencia y, más significativamente, en su recepción Victoriana.
Aunque a menudo es simplemente leído como un relato esencialmente elegíaco de la elegancia de la Regencia, anticipando la popularidad del Romance Regencia en el siglo XX, las novelas de Catherine Gore realizan una revaloración de la Regencia para los Victorianos y sus principales lectores de clase media, teniendo en cuenta tanto la demanda popular de interpretaciones escapistas que vuelven la vista a una época y elegancias perdidas, como para el sentido de superioridad consentido por la sedada clase media a través de la exposición del lado sórdido del brillo superficial de la Regencia. Winifred Hughes habla del “tono agridulce de las novelas de Cecil, en las cuales Gore combina el renacimiento de la Antigua comedia centellante de modales con una elegía por su irrevocable perdida” (the bittersweet tone of the Cecil novels, in which Gore combines a revival of the old sparkling comedy of manners with an elegy for its irrevocable loss") (192), a pesar de que Andrew Elfenbein ha demonstrado en su reciente artículo �gEl Byron de las obras Silver-fork y la imagen de la Inglaterra de la Regencia” (“Silver- Fork Byron and the Image of Regency England”) que hay una cara mucho más oscura en la reescritura de Gore de la Regencia. En las novelas Victorianas Silver-Fork, coloca a las mujeres en el centro de sus argumentos para sugerir que los despreocupados hombres de la Regencia, incluyendo Byron, causan un sufrimiento considerable a las mujeres con las que se relacionan” (“bring women to the centre of their plots to suggest that carefree Regency men, including Byron, cause considerable suffering to the women with whom they are associated” (78). Las novelas de más éxito de Gore comparten esta preocupación por la reescritura de una atractiva pero repulsiva figura Byronica con Edward Bulwer-Lytton y Pelham; or The Adventures of a Gentleman (Pelham; o Las aventuras de un caballero) (1828), lo cuál puede ser visto como estableciendo la fórmula del Silver-fork y también Venetia de Benjamin Disraeli, que está, como las novelas de Gore, modelada de cerca sobre la vida de Byron.
La secuela de Cecil, o las aventuras de un vanidoso (Cecil, or Adventures of a Coxcomb), Cecil, un noble (, Cecil, a Peer), también publicada en 1841 y que demuestra la increíble velocidad a la que Gore escribía sus novelas, no tuvo tanto éxito como las primera de las novelas de Cecil. Las siguientes novelas Silver-Fork de Catherine Gore, trazan ya el mapa de la desaparición del género a partir de mediados de siglo.
Referencias
Elfenbein, Andrew. “Silver-Fork Byron and the Image of Regency England,” Frances Wilson, ed. Byromania: Portraits of the Artist in Nineteenth-and Twentieth-Century Culture (Basingstoke: Macmillan, 1999), 77-92.
Gore, Catherine.Cecil; or the Adventures of a Coxcomb. London: Richard Bentley, 1845.
Hughes, Winifred. “Elegies for the Regency: Catherine Gore’s Dandy Novels,” Nineteenth-Century Literature 50.2 (1995): 189-209.
Última modificación 2 deciembre de 2002; Traducción 17 febrero 2010